Garantizar unos resultados clínicos óptimos y la seguridad de los pacientes es una prioridad en Diaverum. Por ello, nuestro modelo de cuidado los prioriza.
Todo el trabajo realizado por nuestros profesionales se rigue por estrictas normas y procedimientos de obligado cumplimento por todo el personal. Estas normas y procedimientos no son estáticos si no que evolucionan y son modificados cuando es necesario para adecuarlos a los nuevos avances en la atención renal y las nuevas tecnologías. Como muestra de la adaptación de la compañía a los avances tecnológicos, es la apuesta que Diaverum hace en nuevas vías de digitalización en los procesos como herramienta para que los profesionales puedan desarrollar su trabajo de la mejor manera posible.
La estrategia de Diaverum en la prestación de los cuidados asistenciales, se basa en cinco aspectos clave:
- Estándares clínicos: políticas y procedimientos que garantizan unos cuidados y una seguridad de gran calidad
- Estándares médicos: estrategias integrales de tratamiento que optimizan los resultados médicos gracias a una prestación de cuidados más eficiente
- Medición del rendimiento: supervisión continua de los resultados médicos
Formación de pacientes y personal: tanto de forma virtual como presencial - Investigación científica.
Basamos nuestros servicios y procesos en la evaluación y monitorización continua de nuestra actividad y nuestros resultados, con el fin de mejorar nuestras políticas y procedimientos, aprendiendo de nuestra experiencia y de nuestro personal mediante encuestas, auditorías internas periódicas y en respuesta a los requerimientos de las normativas y regulaciones locales. Reforzamos nuestras prácticas clínicas basándonos en la evidencia científica, focalizandonos en los procesos educativos y formativos de nuestro Plan de Formación Anual.
La transparencia es la base de nuestro trabajo, y nuestro sistema de Medición del Rendimiento Clínico evalúa y compara los resultados médicos en todos nuestros centros de diálisis a nivel mundial.
Diaverum cuenta con un modelo de servicio y digitalización, liderado por un sólido marco de gestión clínica y habilitado por una infraestructura digital en continua evolución. Este modelo de servicio se basa en la gestión clínica, la cual está respaldada por herramientas de control y seguimiento (auditorias clínicas, reporte de incidentes, soporte clínico y gestión de datos) y apoyada por una infraestructura digital con herramientas como TGS (aplicación que permite el volcado automático de los datos desde el propio monitor de diálisis al sistema de gestión de la historia clínica del paciente, agilizando los procesos), PGS (sistema de gestión de la medicación), iRIMS (programa de gestión interno propio para la informatización de la historia clínica del paciente), d.People (plataforma de formación online) o la app d.Care (aplicación desarrollada por Diaverum y destinada a los pacientes renales, que proporciona información relacionada con el tratamiento involucrando así al paciente activamente en su propio cuidado y bienestar).